A lo largo de sus 64 años de historia, la muñeca más famosa del mundo ha conducido muchos coches, pero solo uno de ellos acabó siendo un coche real que ha terminado en las calles: se trata del Volkswagen #PinkBeetle
Aunque el juguete llegó al garaje de Barbie en el año 2000, el coche real no vio la luz hasta el año 2016 y lo hizo en forma de una serie limitada solo disponible para Estados Unidos.
Sin embargo, el motivo de la decoración tan especial de este New Beetle era el apoyo de Volkswagen con las iniciativas solidarias The Pink Agenda y Fab-U-WISH que buscaban la recaudación de fondos para la ayuda a tratamientos e investigación sobre el cáncer de mama, una iniciativa que tiene el color rosa por bandera en todos los países del mundo.
Así era el Beetle real de Barbie
La edición limitada #PinkBeetle contaba con un motor 1.8 TSI de 170 CV unido a la caja de cambios DSG de 6 velocidades. El llamativo color exterior fue denominado «Fresh Fuschsia Metallic» y también llegaba al interior en detalles como la tapicería y algunos embellecedores y molduras del salpicadero.
Además, este coche (como le habría gustado a su estilosa propietaria rubia) iba completamente equipado con sistema multimedia con pantalla táctil, asientos delanteros calefactados, sistema de acceso y arranque sin llave, faros bixenón y llantas de aleación, de 17 pulgadas en el “coupé” y de 18 pulgadas en el cabrio.
Solo se vendió en Estados Unidos desde 21.890 $ para el coupé y 26.795 $ en el caso del cabrio y su comercialización se anunció con una subasta solidaria en la que la primera unidad fue vendida por 30.272 $ que fueron donados a la lucha contra el cáncer de pecho.
El equipo Andretti, campeón de aquella temporada, participó en las finales del Red Bull Global Rallycross en Los Ángeles con una decoración especial sobre para el Beetle GRC del piloto Scott Speed como apoyo a esta campaña.
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